El ballet se define a si mismo como un tipo de danza muy antigua que ha sido capaz de evolucionar hacia nuestros días. Es originario de los siglos XV-XVI y se inició en el periodo del Renacimiento Italiano. Debido a la forma que tenía de atraer al público, se empezaría a extender desde Italia hasta Francia gracias a la ayuda de Catalina de Médici; gustó mucho en la aristocracia, por lo que fue su principal público. Uno de los primeros trabajos de los bailarines fue el expuesto por Catalina, que tuvo por nombre “Le Paradis D’Amour”. Esta pieza sería representada por primera vez en la boda de su hija, teniendo un éxito bastante importante.
Por aquel entonces las actividades de ocio que entretenían a los aristócratas eran dos básicamente: la literatura y la música, por lo que el ballet sería muy bien recibido. De hecho, las actuaciones eran financiadas gracias al dinero aristócrata, que fue el que hizo que se consiguiera asentar en el mercado.
Resumen de Contenido
- 1 Historia del ballet y bailarines más famosos
- 2 En las siguientes líneas vamos a hacer un repaso a la historia del ballet y como esta ha evolucionado con el tiempo.
- 3 Bailarines de ballet famosos más importantes de la historia
- 3.1 Mijaíl Barýshnikov:
- 3.2 Vaslav Nijinsky (1889-1950):
- 3.3 Serguéi Diáguilev (1872-1929):
- 3.4 Ángel Corella:
- 3.5 Julio Bocca:
- 3.6 Michel Fokine (1880-1942):
- 3.7 Serge Lifar (1905-1986):
- 3.8 Nacho Duato:
- 3.9 Erik Bruhn (1928-1986):
- 3.10 Roberto Bolle:
- 3.11 José Manuel Carreño:
- 3.12 Manuel Legris:
- 3.13 Carlos Acosta:
- 4 ¿Cómo ser bailarín de ballet?
- 5 Consejos para ser bailarines de ballet profesionales
Historia del ballet y bailarines más famosos
Los primeros pasos en la historia del ballet
No sería hasta el año 1573 cuando se desarrollaría la primera exposición del ballet de corte, que terminaría recibiendo el nombre de “Ballet des Polonais”. Esta pieza también sería expuesta en la ópera París por la bailarina citada anteriormente, con el objetivo de entretener a un embajador polaco que en ese momento estaba de visita en el país. Más adelante, ya sobre el año 1581, Catalina produciría otro ballet de corte, esta vez con el nombre de “Ballet Comique de la Reine”; pero lo cierto es que Balthazar de Beaujoyeulx quien se encargaría de la realización de los diferentes arreglos. Finalmente serían Catalina y Baltazar quienes expondrían el corte y para poder hacerlo, tomarían como base de referencia los principios establecidos por la Académie de Baif. Esta primera pieza se caracteriza entre las más grandes del mundo por combinar por primera vez la poesía con la música, la danza, así como la escenografía con el objetivo principal de lograr transmitir una historia dramática de carácter unificada y así se puede definir un poco la historia del ballet y cómo se forjó al primer bailarín.
En las siguientes líneas vamos a hacer un repaso a la historia del ballet y como esta ha evolucionado con el tiempo.
Orígenes y evolución del ballet
Ya más adelante en el tiempo, en los años finales del siglo XVII, Luis XIV de Francia fundaría la que es considerada como la primera escuela de París y del mundo y que recibiría por nombre “Académie Royale de Musique”. De esta surgiría la primera compañía profesional que sería denominada como el “Ballet de la Ópera de París”.
A partir de ese momento, el ballet teatral empezaría a independizarse del arte, aunque si bien es cierto que por el momento estaría completamente relacionado con el ballet ópera. Se desarrollaría desde el centro de Europa hacia a lo largo de otras naciones.
Los primeros ballet internacionales
Por ejemplo, el ballet en Dinamarca (conocido como Royal Danish Ballet) o el ballet ruso (Mariinsky Ballet) serían fundados ya a lo largo del año 1740, pero si bien es cierto que tardaría un poco en coger fuerza (en concreto se esperaría hasta a después del año 1850 para poder hacerlo). En el año 1907, este ballet ruso se desplazaría a lo largo de Francia, en donde el “Ballets Russes” (de Sergei Diaghilev), así como el resto de sus sucesores serían muy influyentes en este tipo de arte.
A partir de entonces, el ballet se conocería a nivel mundial, creando todo tipo de empresas. Las más destacadas fueron el “Ballet Real de Londres” (que se fundaría en el año 1931), el “Ballet de San Francisco” (fundado en el 1933), “El American Ballet Theatre” (cuyo año de fundación es 1937), “El Royal Winnipeg Ballet (del 1939), el “Ballet de Australia” (de 1940), “El Ballet de la Ciudad de Nueva York” (fecha 1948), “El Ballet Nacional de Canadá” (de 1951) y el ballet “Delhi Ballet” (mucho más reciente, ya de 2002), Ballet nacional de España (1978)
Bailarines de ballet famosos
Domenico da Piacenza es considerado como un bailarín que se convertiría en uno de los primeros maestros de baile. Algunos de sus alumnos fueron muy famosos, como Antonio Cornazzano o Guglielmo Ebreo. Domenico dejaría una pieza de ballet clásico muy valorada a día de hoy: “De arte saltandi et choreas ducendi” (cuya traducción sería “En el arte de la danza y la realización del baile), que sería producida finalmente por sus alumnos.
En el año 1489 se produce un evento muy importante cuando el duque de Milán (Gian Galeazzo Sforza) se casa con Tortona y en la boda se realiza una pieza de baile que fue coreografiada por el mismo Borghezio di Botta. Este evento sería escrito por Tristan Calco de Milán y según las referencias que se tienen, fue un evento muy importante, considerándose como parte principal del ballet tal y como se le conoce.
Ya a lo largo del siglo XVIII, en Francia, Pierre Beauchamp, era profesor de baile del rey Luis XIV y terminaría creando las 5 posiciones que hoy en día se conocen (tanto para los pies, como para las manos). Años más tarde, en 1661, Luis XIV crearía la primera escuela de baile y Beauchamp sería nombrado director de la misma en el año 1680.
Siguiendo con el repaso de los bailarines de ballet más importantes, nos encontramos con Jean-Baptiste Lully, un italiano violinista que también sería bailarín, coreógrafo y compositor y quien se incorporaría a la corte de Luis XIV en el año 1652. Una de sus piezas más aclamadas fue “Sun King”. Se caracterizó por contar en la escena en personajes tan dispares como brujas, hombres lobo, gitanos, ladrones, pastores, así como las diosas del universo Diana y Venus.
Ya en el año 1669, en el ballet nacional de Francia se funda la Académie d’Opéra con Pierre Perrin como director
Francia fue como una especie de zona experimental para probar si realmente el ballet tenía cabida en la sociedad; debido a su éxito, los estilos del entretenimiento no tardaron en ser imitados, incluso hasta los ballets reales. Por esta razón, empezaría a extenderse a otros países remotos como España, Polonia, Portugal o Alemania.
Empezaron a surgir todo tipo de compañías relacionadas. Cada compañía tenía el objetivo de hacer una completa gira por toda Europa, siendo capaces de actuar para el público aristocrático.
Se produce un cambio radical a mitades del XIX, momento en el que las bailarinas se terminarán convirtiendo en la intérprete más popular de toda Europa: disminuiría la interpretación de los personajes por hombres y empezarían a ser interpretados mayormente por mujeres.
Aparece el primer maestro del Ballet del Teatro Nacional de la Ópera de Hungría, Frigyes Campillo, quien había trabajado en Budapest allá por los años 1940.
A lo largo de todo el siglo XIX podemos encontrar una gran cantidad de cambios en la sociedad, y esto, al mismo tiempo, tuvo su característico efecto en el ballet. Aparecen algunas bailarinas importantes como Marie Taglioni, Geneviève o Fanny Elssler experimentando con nuevas técnicas como el trabajo de punta. Taglioni llegó a ser muy popular en el ballet nacional y en la ópera, conocida incluso como la “bailarina cristiana”, ya que se presentaba con una imagen ligera y pura (debido mayormente a que se asociaba su estilo con el personaje de la pieza de La Sylphide.)
Elssler, llegaría a la Ópera de París y a través de sus odas, se terminaría convirtiendo en la “Bailarina Pagana” al interpretar la danza “Cachucha”.
El ballet en España tendría su auge en la fundación del ballet nacional España (en el año 1978) en donde ha participado desde el bailarín español Alberto Lorca, hasta Antonio Ruiz Soler, Antonio Gades, Pilar López Júlvez, Manuela Vargas, Victoria Eugenia ‘Betty’ Antonio Canales, José Antonio Ruiz, Israel Galván, Pedro Azorín, entre muchos otros.
Después de haber leído este denso artículo, para poder sumergirnos un poco más en el mundo del ballet, te recomendamos visualizar algunas de las variaciones del lago de los cisnes coreografiado.
A lo largo de la historia hemos podido ver toda una serie de bailarines famosos de ballet coreógrafos, intérpretes, incluso algunos de ellos se han convertido en directores de las academias de baile más prestigiosas de todos los tiempos.
Sin más preámbulos, en las líneas siguientes vamos a analizar los nombres más destacados del ballet clásico, así como algunas de las características de estos profesionales.
Bailarines de ballet famosos más importantes de la historia
Mijaíl Barýshnikov:
Con apodo Misha, está considerado como el mejor de la extensa plantilla de ballet que existe desde el nacimiento. También es coreógrafo y actor en Rusia. De hecho, en una ocasión, el crítico Clive Barnes llegó a decir de él que era el mejor que ha visto a lo largo de toda su vida.
Vaslav Nijinsky (1889-1950):
Por otra parte, también nos encontramos al virtuoso Nijinsky (que también fue coreógrafo ruso), considerado como uno de los bailarines más dotados de a lo largo de la historia del ballet de danza. Se hizo muy popular debido a sus dones extraordinarios, así como por la pasión que derrochaba en el escenario.
Serguéi Diáguilev (1872-1929):
Con apodo “Serge”, fue uno de los empresarios implicados en la fundación de los “Ballets Rusos”; esta entidad sería clave en la historia del ballet en teatros y es que a través de los mismos fueron formados muchos bailarines y coreógrafos que ocuparían su hueco a lo largo de la historia.
Entre los bailarines de ballet de hombres famosos y mujeres más destacados que participarían en ella nos encontramos a Anna Pavlova, Vaslav Nijinsky, George Balanchine, Tamara Karsavina, Olga Jojlova, Bronislava Nijinska, entre muchos otros.
Pero el que sin duda colaboraría más con este virtuoso del ballet sería Ígor Stravinski; y es que el empresario quedaría impresionado con las primeras obras orquestales del músico (cómo Scherzo Fantastique o Fireworks) lo que haría que “Serge” pidiera ciertos arreglos de las piezas de Chopin a Stravinsky para algunos de sus ballets (por ejemplo, solicitó arreglos de “El pájaro de fuego”, “Petrushka” o “La consagración de la Primavera”.
Ángel Corella:
Corella es un bailarín de ballet de España que empezaría a formarse con Karemia Moreno y después siguió estudiando con Victor Ullate. Cuando era pequeño hacía ballet junto con tres hermanas. Sus esfuerzos dieron frutos en el momento en que en mayo del año 1991 terminaría recibiendo el “Primer Premio en el Concurso de Ballet Nacional de España de Valencia”.
Ha bailado danza moderna para algunas celebridades como la Reina Sofía de España, la Reina Isabel II, la princesa Margarita de UK, para Bill Clinton y para George Bush, entre muchos otros.
Julio Bocca:
Bocca es un reconocido bailarín, coreógrafo, director, así como maestro de baile que se ha ganado un reconocimiento a nivel mundial. Entre sus logros más destacados nos encontramos que ha sido artista invitado en el Royal ballet de Londres, también ha participado en el bolshoi ballet de Moscú, en el Alla Scala de Milán, en la Zarzuela de Madrid o en el Ballet de la Ópera de Madrid, entre otros lugares muy importantes.
No hay cambios recientes en su trayectoria profesional debido a que se retiró ya en el 2007 como profesional en un espectáculo que dio en Argentina y que fue gratuito.
Michel Fokine (1880-1942):
En este listado de bailarines de ballet famosos argentinos nos encontramos con Fokine, quien empezaría su formación a la temprana edad de 9 años en la Escuela de Teatro de su ciudad Natal.
Desde el primer momento tenía claro que quería cambiar los estereotipos clásicos del ballet tal y como se lo conocía. Sin embargo, presentaría todas sus ideas a la administración del Teatro Imperial pero todas fueron rechazadas. Entre sus primeros trabajos destacamos “Acis y Galatea” o “La muerte del cisne”. Sus obras todavía son de las más interpretadas.
Serge Lifar (1905-1986):
Lifar no empezaría en el mundo del ballet con buen pie, pero terminaría convirtiéndose en uno de los bailarines más populares de todos los tiempos. Tenía una ambición sobrenatural, por lo que aprovechaba al máximo cualquier oportunidad que se le presentase. De esta manera, usaría sus habilidades para poder atraer a celebridades tan importantes como Misia Sert, Serguéi Diáguilev o incluso a Coco Chanel.
Aunque si bien es cierto que el primer ballet de Lifar, que llevó por título Renard, no fue una obra maestra, con el paso del tiempo demostró que había aprendido mucho de Balanchine, Diáguilev o de Stravinski, habiendo una clara evolución en su carrera.
Nacho Duato:
Nacho Duato fue un bailarín de ballet y coreógrafo español. Sería nombrado director artístico de la Compañía Nacional de Danza desde el año 1990 hasta julio del 2010.
Su carrera estuvo plagada de logros; ya desde bien pequeño empezaría a formar parte de la Rambert School of Londres y terminaría ampliando sus estudios en la Mudra School de Maurice Béjart (Bruselas), así como en la American Dance Centre de Alvin Ailey (Nueva York).
Ya en el año 1980 empezaría su carrera profesional con el reconocido Cullberg Ballet de Estocolmo.
Erik Bruhn (1928-1986):
Erik es un pseudónimo de Belton Evers, empezaría su formación en la popular Escuela del Real Ballet Danés en el año 1937 junto con el virtuoso Hans Beck. Sería ya en el 1947 cuando se uniría a la compañía asociada a esa misma y se convertiría en un bailarín solista en el año 1959. Sobretodo destacó por sus interpretaciones y sus argumentos ballet clásico en piezas como “Danseur noble”.
Incluso en el año 1969 llegaría a grabar para la televisión americana su propia versión de Giselle conjuntamente con la bailarina Carla Fracci.
Roberto Bolle:
Este bailarín ha estado en los mejores escenarios de a lo largo de toda Italia, además de las consideradas como las mejores compañías de todos los tiempos. Lo hemos podido ver en el Royal Ballet de Londres, en el Ballet Nacional Canadiense, el Ballet de Estocolmo, el Ballet de Tokio o en el American Ballet Theatre de Nueva York.
José Manuel Carreño:
Es un popular bailarín de Cuba que empezaría a pasearse desde muy pequeño en los salones de las principales compañías de ballet del país isleño, llegando pronto a ganarse el cariño de sus bailarines y de los diferentes maestros. En el momento en el que llegó a los 10 años, empezaría su formación en la Escuela Provincial de Ballet de La Habana, en donde desde el primer momento demostró que tenía habilidades innatas para el baile.
En el año 1983 recibiría el “Primer Premio en Actuación Individual” en el 6º Festival de Escuelas de Ballet y Danza Moderna. Ya en el 2010 anunciaría que se retiraba del American Ballet Theatre con una actuación de El lago de los cisnes en el 2011.
Manuel Legris:
Francés que entró a la Danza de la Ópera de París en el año 1976 y más adelante en el cuerpo de baile en el 1980. Se terminaría convirtiendo en solita en el año 1982 y en estrella el 11 de julio de 1986, justamente después de haber representado el ballet de Raymonda (que fue coreografiado por Rudolf Nureyev).
Se caracteriza por tener una técnica muy precisa, sin fallas, así como una amplia riqueza expresiva.
Carlos Acosta:
Y terminamos con Carlos Acosta, quien empezaría estudiando ballet en la “Escuela Nacional de Ballet de Cuba” en donde se encontró con profesionales tan reconocidos como Ramona de Sáa. Ya en el año 1991 se terminaría graduando con las máximas calificaciones, incluso hasta recibiría una medalla de oro por ello.
A lo largo de toda su trayectoria ha bailado en muchas compañías, como en la “English National Ballet”, en “Ballet Nacional de Cuba”, en “American Ballet Theatre” o en “Houston Ballet”. Se convertiría en un miembro permanente de “The Royal Ballet” entre los años 1998 y 2003.
Estos son los nombres que más resuenan en el mundo del ballet en la historia y que ahora tú también conoces.
¿Cómo ser bailarín de ballet?
Son muchos los bailarines hombres de ballet los que se preparan para cursar su carrera y convertirse en los mejores del momento.
Una de las metas principales del artista es convertirse en alumno del “Ballet Nacional de España” (BNE); estamos hablando de una compañía que se fundó en el año 1978 y que ahora mismo tiene titularidad pública. Actualmente cuenta con toda una serie de giras anuales, tanto de carácter nacional, como internacional, que permiten asegurar su continuidad.
El principal cometido de su existencia está relacionado acerca de preservar y de extender el patrimonio de un rico patrimonio cultural, en el que destacan tradiciones en diferentes formas como folclore, flamenca, bolera, entre muchas otras.
Para poder adaptarse a los objetivos que se persiguen, su repertorio se va actualizando de forma continua y por ello se recuperan muchas coreografías históricas de algunos coreógrafos y bailarines, en las que participan tanto coreógrafos famosos que han revolucionado por completo el género del ballet (bailarines de ballet clásicos), como jóvenes promesas.
Y no solo eso, sino que también llevan a cabo algunas actividades pedagógicas creando nuevos públicos para que todo el mundo pueda disfrutar del ballet.
Lo cierto es que el hecho de crear una compañía de Danza Española era una idea que se había mantenido durante el siglo XIX. Sin embargo, no sería hasta el año 1978, de la mano de Antonio Gades consolidado como el primer director, cuando la compañía sería creada. A partir de entonces han participado todo tipo de bailarines de ballet clásicos españoles y de a lo largo de todo el mundo. La Compañía debutaría por primera vez el 11 de junio del año 1979 en el Teatro Principal de Valencia.
Entre los nombres de bailarines de ballet masculinos y bailarinas de ballet más destacados de la compañía, destacamos Antonio Gades, José Granero, Antonio Ruiz Soler, Pilar López Júlvez, Rafael Aguilar, Blanca del Rey, Israel Galván, Manuela Vargas, Victoria Eugenia “Betty”, Guillermina Martínez “Mariemma”, Antonio Canales, José Antonio Ruiz, Juanjo Linares o Pedro Azorín entre otros nombres.
Algunos bailarines que empezaron tarde
Podemos encontrar desde bailarines de ballet que empezaron tarde, pero que aun así se convirtieron en unos auténticos virtuosos en lo suyo, hasta algunos que tuvieron el privilegio de empezar desde una temprana edad.
El BNE empezaría a ser dirigido por Antonio Najarro desde el año 2011 y actualmente se considera como el principal exponente de la danza española; muchas personas que se preguntan cómo ser bailarín de ballet ponen su vista en la entidad.
El actual director ha apoyado algunas iniciativas que relacionan el ballet con la danza (por ejemplo, algunos desfiles programados con vestuario escénico), como el desfile de “Siente el Vestuario del BNE 2014 y 2015, con la fotografía o con las artes plásticas.
Ya en el 2016, el BNE junto con la Marca España firmaría un convenio reciente con el objetivo de extender el patrimonio cultural del país y ampliar el reconocimiento del mismo.
Ahora que ya conocemos la importancia del BNE, vamos a ver algunos consejos que te ayudarán a empezar con tu sueño.
Consejos para ser bailarines de ballet profesionales
Evalúa tus necesidades
- Si echamos un vistazo al mundo del ballet, podemos encontrar desde bailarines de ballet argentinos, bailarines de ballet mexicanos, españoles, etc… y todos ellos tienen una cosa en común y es que han empezado conociendo su cuerpo, tanto como sus puntos fuertes, como sus limitaciones.
- Cualquier persona que quiera dedicarse a este mundo debe de cumplir con unos requisitos clave: debe de tener una buena espalda, unas piernas fuertes, un cuerpo que sea flexible, tener una cierta gracia mientras estamos bailando y gozar de una buena salud, además de tener un peso saludable.
- Aunque si bien es cierto que no te hace falta todo esto para empezar en el ballet, te será más fácil si es así.
- Los niños tienen más facilidad de aprendizaje, por lo que deberíamos empezar con esta disciplina a la edad más temprana posible.
¿Qué ropa usan los bailarines de ballet?
El hecho de tener el vestuario adecuado no solo nos ayuda, si no que será imprescindible. Si echamos un vistazo a los bailarines de ballet españoles, nos daremos cuenta de que existen algunas prendas que nos darán soporte, permitiéndonos movernos mucho mejor, incluso hasta desarrollar algunas avanzadas técnicas.
Por ejemplo, en algunas escuelas, el vestuario de las chicas bailarinas son leotardos, medias, zapatillas de ballet suaves y falda Georgette; en el caso de los hombres se tendrá otro tipo de ropa de ballet.
El objetivo es que empieces en este mundo de la forma más cómoda posible, en el momento en el que empieces a desarrollar tu habilidad, podrás usar un vestuario mucho más complejo.
Consejo:
No empieces a utilizar zapatillas de Pointe antes de que te lo indique tu maestro; y es que constituyen un riesgo real de experimentar algún tipo de lesión, especialmente si todavía no se controlan.
¿Qué ejercicios hacen los bailarines de ballet?
- Los ejercicios los podemos practicar en casa, pero tenemos que empezar por una academia si o si. Antes de elegir una escuela de ballet, nos tenemos que asegurar de que realmente cumplan con nuestras expectativas: analiza si algunos de los alumnos que se han graduado se han terminado incorporando a una compañía profesional (es cierto que puede que no nos vayamos a encontrar con referencias del mejor bailarín de ballet ruso, pero no estaría mal que pudiéramos escudriñar el futuro que tenemos con la compañía).
- En el caso de que queramos convertirnos en alguien en el mundo del ballet, deberíamos de contratar a un profesor privado.
- Antes de pensar siquiera en practicar algunas piezas célebres, como el Lago de los cisnes o convertirnos en un bailarín de ballet Billy Elliot, primeramente nos tendremos que conocer los 6 movimientos; y no solo conocerlos, sino que los tendremos que poder hacer de una forma muy natural, como si ya fueran parte de nosotros como lo es comer o caminar los pasos de ballet es lo primero que debemos memorizar y realizar con soltura.
Ejercicios para casa
- A la hora de practicar ballet es importante que estemos en forma. Los profesores nos recomendarán algunos deportes como el Yoga, natación, pilates, un poco de bici, escalada, incluso hasta hip hop.
- El usuario no solamente tiene que entrenar, sino que también debería de hacer ciertos ejercicios para desconectar de vez en cuando. Está demostrado que uno de los primeros pasos del aprendizaje se relaciona con no pensar en todo momento en el entrenamiento en cuestión; el estrés es el principal enemigo de ese aprendizaje.
Cambia tu forma de pensar
- Si hay otra cosa que caracteriza a los bailarines de ballet chilenos con, por ejemplo, los bailarines de ballet rusos, o de cualquier otra parte del mundo, es la forma que tienen de pensar.
- Lo primero que nos tiene que quedar claro es que cuando hablamos de ballet nos referimos a una forma de interpretar, en ningún caso es una competición. Además, también hay que considerar que si queremos entrar en una de las mejores escuelas del mundo habrá que trabajar continuamente (en especial si nuestro objetivo es tener una beca en ellas).
- También tienes que saber que en este mundo nunca se sabe cuándo se nos va a presentar una oportunidad, por ejemplo, hay personas que se han convertido en bailarines de ballet internacionales con la temprana edad de 15-16 años, lo que implica tener que viajar por todo el mundo al mismo tiempo que nos convertimos en solista.
- Analiza qué es tan importante y que vas a sacrificar para lograr tus sueños.
Algunos consejos prácticos
- Recuerda siempre tus sueños, tus objetivos y tus límites. Te servirán para motivarte, para no caer.
- Siempre se positivo o positiva.
- Consigue la ropa adecuada para tu entrenamiento y nada te fallará.
- Nunca te des por vencida.
- No dejes que te pueda el ego; aunque seas la mejor del mundo recuerda que todavía hay trabajo por delante.
- Atrévete a salir de tu zona de confort y prueba con nuevos objetivos.
Con estas claves llegarás con tu ballet a Cuba, México, París, Nueva York o en definitiva, a cualquier lugar del mundo que te propongas a través del esfuerzo y dedicación que conlleva y a representar las mejores obras de ballet en el mundo.